El Procurador General de Texas Ken Paxton obtuvo una importante victoria al proteger los derechos de los hospitales y médicos de Texas a negarse a realizar abortos que están prohibidos por la ley estatal. La Corte Suprema de los Estados Unidos (Supreme Court of the United States, SCOTUS) se negó a escuchar los argumentos en un caso que buscaba revocar una orden judicial restrictiva que impedía a la Administración Biden-Harris hacer cumplir las directrices ilegales sobre el aborto. La orden judicial restrictiva seguirá vigente.

La guía, emitida por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. (Health and Human Services, HHS), intentó ilegalmente obligar a los proveedores médicos a realizar abortos en violación de la ley estatal. La Administración Biden-Harris intentó hacerlo bajo una ley federal conocida como Ley de Tratamiento Médico de Emergencia y de Parto (Emergency Medical Treatment and Labor Act, EMTALA). La ley, promulgada por el Congreso para garantizar que los hospitales no rechacen la atención médica de emergencia esencial debido a la incapacidad de pago del paciente, no dice nada sobre el aborto, pero fue utilizada como pretexto por la Administración para intentar obligar a los proveedores médicos a proporcionar y realizar abortos. Si la guía del HHS hubiera entrado en vigor, los médicos y las instituciones médicas de Texas podrían haber enfrentado graves consecuencias financieras, como ser excluidos de Medicare, por negarse a violar la ley estatal para cumplir con el mandato federal inconstitucional.

En julio de 2022, el Procurador General Paxton presentó una acción legal contra la Administración Biden-Harris por la guía. Un tribunal federal de distrito emitió una orden judicial restrictiva que bloqueaba la orientación ilegal en agosto de 2022, y el Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito de EE. UU. confirmó la orden judicial en enero de 2024. Ahora, la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos se ha negado a aceptar el intento de la Administración Biden-Harris de revertir la orden judicial.

"Esta es una gran victoria en SCOTUS que protegerá a los proveedores médicos de Texas de verse obligados a violar la ley estatal", dijo el Procurador General Paxton. "Ningún médico de Texas debería ser obligado a violar su conciencia o la ley solo para hacer su trabajo. Demandamos con éxito y detuvimos el intento por la puerta trasera de la Administración Biden-Harris de anular las leyes estatales sobre el aborto".

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